Los sistemas prefabricados asfálticos son membranas bituminosas impermeables a base de asfalto modificado con polímero APP o SBS.

Estos sistemas los podemos usar como sistemas de impermeabilización, principalmente en techos, pero también podemos encontrar aplicaciones en muros de contención, sótanos, estructuras, etc.

¿Cuál es la diferencia ente un APP y un SBS?

El APP es un Polipropileno Atáctico y el SBS es Estireno-Butadieno-Estireno, si no somos químicos no vamos a encontrar mayor diferencia solo con su nombre; si lo vemos como aplicadores o instaladores tampoco existe una diferencia real en temas de desempeño. Sin embargo, encontramos fabricantes que resaltaran las propiedades de su producto, cualquiera que éste sea.

Ambos son sistemas asfálticos, el APP es un asfalto plástico y el SBS un asfalto elástico. Según sus propiedades físicas, una de las diferencias notables es que el SBS se considera que tiene un mejor comportamiento en temperaturas muy bajas, esto lo podemos observar debajo de los -15ºC, por lo que, para temas prácticos, en México no es un diferenciador.

Desde el punto de vista de los técnicos que aplican estos sistemas se pudieran encontrar diferencias al momento de “torchar” o aplicar calor con soplete a la membrana; específicamente, el APP se funde a 150ºC, temperatura a la cual se derrite el asfalto y es cuando esta listo para instalarse o adherirse; por otro lado, el SBS se funde a una temperatura menor, pero aquí la membrana se pone “pegajosa” y es cuando esta lista para adherirse, si la membrana se derrite entonces aplicamos demasiado calor. Esta diferencia se debe a que en un inicio las membranas SBS fueron diseñadas para sistemas adheridos con asfalto caliente o, como coloquialmente se conoce: “moppeados”, esto es cuando se aplica el asfalto caliente con un trapeador, “Hot-Mopping” en inglés. Tiempo después esta tecnología permitió sistemas de adherencia con asfalto en frío o se diseñaron para poderse aplicar con calor por medio de un soplete. Las membranas de APP están diseñadas regularmente para ser instaladas con soplete “torch-down”.

¿Cuál es mejor?

Los dos productos pueden lograr un excelente desempeño, pero ésto dependerá de la calidad del asfalto y los polímeros al momento de su fabricación, la calidad de su aplicación y por supuesto el diseño del sistema de impermeabilización. Por eso es importante poder evaluar al fabricante y al contratista con el apoyo de un experto antes de tomar una decisión.

¿Qué beneficios y desventajas podemos encontrar en ambos sistemas prefabricados asfálticos?

Beneficios:

·      Relación Costo / Beneficio – Este es un de sus mejores atributos, ya que son sistemas que pueden ofrecer un buen desempeño a un buen costo.

·      Flexibilidad y Durabilidad – La flexibilidad permite a la membrana expandirse y contraerse junto con la estructura del edificio, lo que le brinda una buena durabilidad.

·      Nulo de Mantenimiento – El mantenimiento que requieren estos sistemas es nulo y la reparación por daños es muy sencilla.

·      Resistencia a daños y punzonamientos – Dado el espesor de la membrana y su construcción como sistema a dos o tres capas es mucho muy resistente.

Desventajas:

·      Mala calidad – Al ser un producto con alta demanda, es fácil encontrar una gran oferta de marcas y productos y, lamentablemente, no todos cuentan con el mismo nivel de calidad y desempeño probado. Inclusive los grandes fabricantes tienen una amplia gama, desde uno de pobre desempeño hasta uno de excelente desempeño.

·      Aplicación – Es muy común o es lo normal, ver estos sistemas aplicados a una sola capa, esto quiere decir que solo se aplica un primer y después solo una capa de manto con acabado gravillado, cuando en realidad estos sistemas se diseñaron para ser a dos o tres capas, uno o dos capas bases (lisos) y una capa superior “cap sheet” el cual tiene un acabado gravillado. ¿Por qué se promueve y se instalan los sistemas a una capa a sabiendas de que se arriesga el desempeño? Aquí espero que algún fabricante nos pueda comentar.

·      Mano de Obra Calificada – No existe programa real de certificación y capacitación en la industria mexicana por parte de fabricantes, en el cual se permita evaluar y calificar a compañías instaladoras.

·      Garantías – La oferta de los fabricantes nacionales en el tema de garantías es muy limitada, a diferencia de algunas compañías extranjeras o americanas las cuales ofrecen robustas garantías de sistema.